Partió el filósofo e historiador que impulsó publicaciones y los derechos de los jubilados universitarios
Luis Rionda Arreguín, filósofo, historiador, impulsor de publicaciones y de los derechos de los jubilados universitarios, murió el pasado martes 17 de diciembre. Aunque oriundo de Silao, pasó la mayor parte de su vida en la ciudad capital, motivo por el cual el Ayuntamiento de Guanajuato le otorgó el reconocimiento en calidad de “Guanajuatense Distinguido” el 26 de marzo de 2010.
Luis Rionda Arreguín era maestro en filosofía y profesor jubilado de la Universidad de Guanajuato. Nació el 6 de junio de 1936 en Silao. Fue el quinto de seis hermanos, hijos del capitán Isauro Rionda Liceaga y María Luisa Arreguín Pesquera. Se casó con Ana Josefina Ornelas, originaria de Jalisco, y son padres de Ana Faviola y Luis Javier.
Otro de los hermanos Rionda Arreguín destacados en la ciudad fue Isauro, quien se desempeñara como catedrático, integrante del Teatro Universitario, director del Archivo General del Estado y fue Cronista Vitalicio de la ciudad.
Datos difundidos en un texto de su sobrino Luis Miguel Rionda Ramírez, también docente e investigador universitario, destaca la siguiente información:
Luis Rionda Arreguín estudió filosofía en la Escuela de Filosofía y Letras de la Universidad de Guanajuato, donde formó parte de una de las primeras generaciones. Tomó clases en un espacio prestado por la Escuela de Arquitectura, en la actual unidad Belem, antes de que la escuela fuera trasladada a Valenciana.
En 1975 fue nombrado director de la escuela donde se formó, y en ese papel promovió que el archivo histórico del municipio de Guanajuato se trasladase a las instalaciones de ese plantel, para que los estudiantes de la licenciatura en Historia, establecida en 1963, pudiesen realizar trabajo de investigación y paleografía. También apoyó la iniciativa del filósofo inmigrante Ernesto Scheffler para abrir la Unidad de Investigaciones Filosóficas en 1978, para orientar la vocación de la filosofía guanajuatense hacia el ejercicio de la indagación y la dialéctica.
En 1979 entregó la dirección de la escuela, para fundar al año siguiente el Centro de Investigaciones Humanísticas de la UG (CIHUG), antecedente del actual Departamento de Cultura y Sociedad. Ese centro se transformó con el tiempo en uno de los principales núcleos de trabajo histórico, literario y, por supuesto, filosófico en nuestra entidad. Dirigiría esa unidad hasta 1997, cuando se jubiló. En 2005, cuando el CIHUG estrenó instalaciones, su biblioteca fue bautizada con el nombre del maestro Rionda.
Otras iniciativas de carácter académico y cultural del maestro fueron la fundación y conducción desde 1972 de la revista Colmena Universitaria; también fue corresponsal del Seminario de Historia Mexicana en Guanajuato desde los años setenta; fue miembro de la comisión organizadora de los festejos del 175 Aniversario del Inicio de la Independencia y el 75 de la Revolución en 1985.
Como académico, publicó una gran cantidad de libros, artículos especializados, así como de difusión. Impartió docenas de conferencias a públicos de todo tipo. Recorrió el país y el extranjero con sus aportaciones filosóficas, que le dieron reconocimiento dentro del mundo filosófico mexicano y de otras latitudes. Presidió la Asociación de Jubilados de la UG.
El filósofo fue despedido por su familia, en la que hay integrantes que sobresalen en la academia, las artes y la política:
Luis Miguel Rionda Ramírez, sobrino del maestro e hijo del recordado cronista Isauro Rionda Arreguín, es destacado docente e investigador, y fue consejero en el Instituto Electoral del Estado de Guanajuato (IEEG). Su hermano Jorge Isauro también fue un intelectual, docente e investigador.
En la política han participado dos mujeres de la familia: Fabiola Rionda y Margarita Rionda.
Diversas instituciones hicieron públicas las condolencias por la pérdida de uno de los intelectuales más distinguidos de la ciudad.
