sábado, septiembre 21, 2024
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NO PUEDO CONCEBIR LA VIDA SIN EL PIANO: BRAULIO ALCARAZ

Joven promesa artística, compuso en Polonia su obra Koliber (Colibrí).

Braulio Alcaraz es una de las jóvenes promesas artísticas de su generación en Guanajuato. Leonés iniciado en escuelas de su ciudad: estudiante de la Casa de la Cultura Diego Rivera, donde comenzó su camino a los 9 años. Luego ingresó a la Escuela de Música de León y posteriormente cursó en la Universidad de Guanajuato la licenciatura en Música en el año 2008, de la cual es egresado con mención de honor laureado en 2013.

Su talento ha atravesado fronteras al ser uno de los pocos pianistas guanajuatenses con presencia en México y el extranjero gracias a que también realizó estudios de postgrado en piano en la Universidad de Música Fryderyk Chopin, en Polonia.

Es oriundo de los Castillos, colonia del norte de León, antigua hacienda agrícola y uno de los asentamientos más populosos de la ciudad:

“No vengo de una familia de músicos. Mis papás me iniciaron en actividades, entre ellas la música. Iba 20 minutos al día, cuando tenía 9 años, a la Casa de la Cultura y se me fue creando un hábito. Mis papás me dijeron que no era para sacar dieces, sino que era como un compromiso”.

Braulio Alcaraz, instrumentista leonés, con especialidad en piano.

Su madre estuvo presente en el concierto, orgullosa y emocionada vio la calurosa respuesta de emoción de un público de extranjeros y mexicanos de todas las edades. El joven pianista continúa:

“El tener ese compromiso con tocar el piano nos fue gustando a los tres como familia y de la secundaria decido entrar a otra escuela de música, donde llevaba más materias y con el tiempo surgió la inquietud de entrar a la Universidad”.

Y expresa la frase contundente:

“Yo no veía mis actividades sin el piano”. Prosigue:

“Yo no sabía que existía una carrera de música, pero una maestra me dijo que la había. Investigo y entro a la Universidad de Guanajuato y ahí cursé mi licenciatura en instrumentista, con especialidad en piano”.

La UG le impulsó la vocación:

“Tuve varios maestros que me ayudaron muchísimo en mi formación”.

Rumbo a Polonia

Luego relata su gran coyuntura de vida:

“Desde la adolescencia había visto una película que me motivó para irme a estudiar al extranjero y con la Universidad de Guanajuato se concretó esa parte”.

La cinta es Shine (Claroscuro), una película australiana de 1996, dirigida por Scott Hicks, acerca de la historia del pianista David Helfgott, también australiano, quien sufrió una crisis emocional a causa, entre otras cosas, de los maltratos que le infligió su padre.

Braulio explica:

“Es acerca de un pianista que se queda loco y pensé: yo no quiero sólo quedarme loco, quiero volverme loco y tocar”.

Esa motivación lo llevó a elegir Polonia, a donde estuvo yendo y viniendo durante cinco años, hasta que lo alcanzó la pandemia de Covid 19.

Interpretación pública, ofrecer charlas, dar clases, son algunas de las actividades relacionadas con su formación profesional.

Joven compositor

Fue ese momento decisivo para mantener comunicación a distancia con músicos y estudiantes y de ahí surgió una creación de su autoría, la pieza Koliber, que en polaco significa Colibrí y que interpretó durante el concierto en el museo.

La obra tiene un significado especial para él:

“La compuse durante la pandemia, la que me ayudó a sobrellevarla, al igual que muchas etapas de mi vida, como la distancia, el amor y la muerte de mi padre. El arte me rescató”.

En octubre pasado se cumplieron dos años de su regreso a México. Remata la charla:

“Estoy muy agradecido con lo vivido. Quiero compartirlo dando clases, tocando y dando charlas a los jóvenes. Quiero ser como mis profesores de aquí y de allá: recuerdo que después de cada clase que asistía, yo salía muy motivado y quiero que esa motivación sea un empujón para seguir haciendo esto, para motivar a otros jóvenes a comprometerse, pero con un compromiso libre, que se disfrute”.

Urgía terminar la charla: le esperaba el público para dialogar y tomar un vino tinto con el músico-compositor.

Federico Velio Ortega
Federico Velio Ortega
Periodista, maestro en Investigador Histórica, amante de la lectura, la escritura y el café. Literato por circunstancia y barista por pasión (y también al revés)
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