“Ese es el problema de beber, pensaba, mientras me servía un trago. Si algo malo pasa, bebes para intentar olvidar; si algo bueno pasa, bebes para celebrar; y si nada pasa, bebes para hacer que algo pase”, decía a sus amigos el “poeta maldito” Charles Bukowski.
La investigadora Nadia Menéndez Di Pardo, quien desde hace varios años ha estudiado el tema, elevó la voz para asegurar: “Desde la segunda mitad del siglo XIX, en la Ciudad de México el alcoholismo ha sido una importante preocupación de los médicos, quienes lo vinculaban con la criminalidad conferida particularmente a las clases sociales más bajas”.
Revisar historiográficamente los apuntes que la medicina del porfiriato formulaba sobre el alcoholismo permite conocer la contribución médica en la construcción del discurso de las clases sociales dominantes, que procuraba el control social de las clases subalternas, dando lugar así a la estigmatización de la pobreza y de los miembros de la clase obrera.
Al presentar virtualmente su más reciente libro, Alcoholismo. Vicio, enfermedad y muerte. La mirada médica entre 1870 y 1910 en la Ciudad de México, Menéndez Di Pardo refirió que el alcoholismo es un padecimiento grave, progresivo y mortal, caracterizado por el consumo excesivo y la dependencia de bebidas etílicas, presente históricamente en la sociedad.
Tanto, que en ese mismo periodo el alcoholismo fue llevado al grabado y a la fotografía en innumerables imágenes que se popularizaron muy pronto. Personajes históricos como José Guadalupe Posada con sus calaveras, y Agustín Víctor Casasola con sus fotografías de fondas, bebedores y cantinas, se han ocupado del tema desde su mirada artística.
“La importancia del libro radica en que ofrece una visión detallada sobre la manera como se definió, trató y abordó este tema entre 1870 y 1910, desde una óptica médica, histórica y social. Durante ese periodo se describieron las causas de la enfermedad, mismas que, se decía, estaban ligadas a diversos factores que vivía y padecía parte de la sociedad”, anotó.
Entre otros, mencionó la especialista, la miseria, la ociosidad, el clima, la edad, la profesión y las excesivas jornadas laborales que contribuyeron a enraizar una imagen negativa de las y los enfermos. Eso originó que el alcoholismo se considerara un vicio y se asociara con la pobreza. Así, se generó un estigma hacia los enfermos alcohólicos.
Esas personas eran vistas y vistos como gente peligrosa, de muy malas costumbres e irresponsables, en el contexto de un discurso que, dijo la investigadora, predomina hasta la fecha. Se le asoció también con otras enfermedades infecciosas y crónicas, como la neumonía, la sífilis, la tuberculosis o el tifus, por lo que el alcohólico era rechazado.
“Se decía que el sistema inmune del alcohólico era débil y por eso podía contagiarse de casi cualquier otra afección. Los médicos tuvieron un papel crucial al definir y tratar este padecimiento, al relacionar alcoholismo, criminalidad y violencia; fueron los primeros «etnólogos» al describir el contexto de una enfermedad y no solo sus síntomas”, señaló.
Así, el alcoholismo se clasificó en dos tipos: agudo y crónico, abundó Menéndez Di Pardo, y explicó que el agudo ocurría cuando una persona “se emborrachaba de manera accidental”, por lo que era un estado transitorio; en cambio, el crónico derivaba en otras enfermedades graves como cirrosis, hígado graso y hepatitis, por mencionar algunas.
En el siglo XIX, agregó, la producción de alcohol era abundante y dio lugar a un mayor consumo, “un aspecto que nos ayuda a contextualizar la problemática”. En el siglo XX ocurrió un cambio radical en la percepción del alcoholismo: Dejó de considerarse un vicio para clasificarse como una enfermedad con una amplia gama de síntomas y causas.
Para realizar esta obra, la investigadora revisó diversos documentos históricos, entre los que destacan algunas tesis de grado, las cuales brindaron información privilegiada sobre las definiciones médicas que se daban en aquellos años a la enfermedad, así como datos culturales y sociales. El libro puede consultarse gratis en la Mediateca del INAH.
Finalmente, informó que el libro Alcoholismo. Vicio, enfermedad y muerte. La mirada médica entre 1870 y 1910 en la Ciudad de México se presentará en la edición 35 de la Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH), que tendrá lugar del 8 al 18 de agosto de 2024, en el Museo Nacional de Antropología en la Ciudad de México.