Biografía que aclara datos falsos en torno al compositor guanajuatense
Santa Cruz de Juventino Rosas es una localidad donde se respira “Sobre las olas” y donde valses y romance giran en torno al músico que le dio gloria al estado de Guanajuato y orgullo a su pueblo natal. Sin embargo, el cine y la mala historiografía construyeron mitos en torno al personaje. Por eso su principal biógrafo, el abogado, historiador, cronista y escritor Víctor Manuel García Flores publicó una extensa obra de más de 600 páginas con varios propósitos: honrar la memoria del hijo pródigo que murió en Cuba y desmentir afirmaciones sobre la vida de un hombre que impresionó al mundo de su tiempo con un vals que arrasó en Europa y México.
El libro Juventino Rosas… de Santa Cruz a Surgidero presenta una estructura atípica: un capítulo monográfico de Santa Cruz, cuatro más sobre la vida y obras de Juventino Rosas, desde Santa Cruz —en donde nació— hasta Surgidero de Batabanó, Cuba, en donde murió.
Así es, el primer capítulo es una resumida historia de Santa Cruz, en la que García Flores recopila datos ya publicados en otras obras de su autoría, para constituirse en uno de los historiadores más acuciosos sobre esa localidad.
El segundo capítulo es sobre Juventino Rosas Cadenas, desde que nació hasta su emigración, de 7 años, a la Ciudad de México. En este tema hay una investigación que parte de las actas de fe de bautismo y de matrimonios de familiares del compositor santacrucense: abuelos, padre, siete hermanos, tíos, y sobrinos de los apellidos Rosas y Cadenas. En este capítulo, Víctor Manuel aclara que Juventino no sólo tuvo dos hermanos y que su hermana no se llamaba Patrocinio. Hace un contexto familiar y social del compositor y consigna datos desconocidos o mal interpretados.
En el tercer capítulo, el autor refiere que es en la Ciudad de México donde comienza a componer piezas de música clásica del romanticismo del siglo XIX; también documenta cómo se integra a orquestas populares como violinista. El autor aclara que Juventino no tocaba instrumentos de aliento, como lo manejan las versiones fílmicas. Lo suyo era el violín.
En ese capítulo narra el fallecimiento del hermano Manuel y los padres de Juventino, de cómo su hermana Matilde se fuga con un norteño y la pierde para siempre. Igualmente muestra un momento clave de la biografía: la estancia del compositor y músico en Santa María Cuautepec, La Magdalena Contreras y Tizapán. En el primer poblado compone el vals “Sobre las olas”, en un bosque y arroyo de esa población que en su tiempo era de las cercanías a la ciudad de México y que ahora está integrada a la metrópoli.
El cuarto capítulo está dedicado especialmente al vals “Sobre las olas”. El autor muestra los éxitos y reconocimientos y echa abajo varios mitos: Juventino no tuvo un violín blanco, sino uno convencional, que no compuso para la Carmelita, la esposa de Porfirio Díaz, ni fue un músico financiado por el dictador.
Víctor Manuel documenta que Juventino Rosas vendió la partitura de “Sobre las olas” por 45 pesos a A. Wagner y Levien y destaca que si bien parecería una acción desesperada y de desventaja económica para el compositor, eso permitió que la pieza fuera conocida e interpretada en México, Europa y Estados Unidos; se convirtió en una obra internacional que le dio reconocimientos y lo llevó a dirigir un sexteto de cámara de cuerdas, ser violinista estelar y ser director de la Orquesta Típica Mexicana. También como violinista triunfó en la Exposición Universal Colombina en Chicago.
Contrario a las versiones que señalan a Juventino Rosas como un hombre económicamente fracasado, Víctor Manuel muestra, en el capítulo quinto, que el santacrucense triunfa en once localidades de Cuba con reconocimientos, aplausos y flores; por infortuna, enfermo de mielitis transversa, falleció. Sufrió durante 12 días al ser mantenido en convalecencia en el puerto Surgidero de Batabanó.
Como lo había comentado antes, la estructura es poco convencional, pues esos capítulos abarcan poco menos de la mitad del libro. La obra cierra con un extenso epílogo en el que se narra qué ha sucedido desde la muerte de Juventino Rosas hasta lo que actualmente se ha hecho con él.
Relata el traslado de los restos del compositor de Cuba a México, los tipos de música clásica del romanticismo de Juventino Rosas, y mejores compositores de México y en el mundo. Es donde aclara la “telaraña de falacias de la vida de Juventino Rosas en prensa y libros anteriores”. Pone énfasis en mitos e imprecisiones que surgieron de la película “Sobre las olas”, de 1950 con Ismael Rodríguez, y como actor Pedro Infante, “llena de mentiras”, recalca.
Víctor Manuel García Flores aclara: “Mi libro es ensayísticas histórica-biográfica, investigando a fondo para reconstruir la veracidad de los hechos de su vida de Rosas, y un análisis de las 34 obras editadas del compositor Juventino Rosas”.
La presentación del libro Juventino Rosas…de Santa Cruz a Surgidero fue en el Auditorio y Museo Juventino Rosas, el sábado 23 de noviembre, a las 12:00 horas. La obra fue comentada por Clara Montoya Carballido, responsable de la cultura en Santa María Cuautepec, y Enrique R. Soriano Valencia, periodista, escritor y experto en escritura y gramática.
