Ancestralmente, el calendario chino se guía por una compleja cosmología donde cada año es tutelado por un animal del zodiaco, siendo el Dragón uno de los más reverenciados, respetados, venerados, y adorados en el ciclo de doce años. Los otros seres sagrados son Rata, Buey, Tigre, Conejo, Serpiente, Caballo, Cabra, Mono, Gallo, Perro y Cerdo.
En esta ocasión, el Año Nuevo Chino estará comprendido entre el 10 de febrero de 2024 y el 28 de enero de 2025, y coincide con el decimoquinto aniversario del hermanamiento entre Beijing y la Ciudad de México, lo que significa que tanto el Dragón Chino como el Águila Mexicana volarán muy alto, llenos de energía y alegría, en un cielo despejado.
El Dragón es la viva representación del liderazgo, y la tenacidad, y encarna la nobleza, el honor, el poder, la buena suerte, y el éxito. Para conocer de cerca toda la parafernalia que se desata cada inicio de Año Nuevo Chino sin necesidad de viajar a esa nación, basta con acudir al Barrio Chino de la Ciudad de México, a unos pasos de la Alameda Central.
El Barrio Chino es uno de los muchos puntos turísticos con que cuenta la capital del país. Surgió en los años 60 del siglo XX gracias a la organización de inmigrantes coreanos, chinos, filipinos y e indonesios, quienes desde entonces se han dedicado al negocio de los restaurantes y cafeterías, y actualmente, a la importación de artículos de esas naciones.
Ocupa dos cuadras de la calle de Dolores y es, al mismo tiempo, una zona de restaurantes especializados en gastronomía oriental, y lo mismo existen locales de lujo que pequeños establecimientos de comida rápida, y tiendas de dulces, helados, bebidas enlatadas y toda suerte de galletas. Ropa, y artículos de ornato y uso cotidiano también se expenden allí.
Es el punto de encuentro, laboral y de vida social de las alrededor de tres mil familias de origen chino que viven en la Ciudad de México. Su historia antigua se remonta a la inmigración china a México entre los años 1880 y 1950. Como el gobierno mexicano no podía atraer suficientes europeos occidentales, se optó por traer trabajadores chinos.
El Arco Chino que da la bienvenida a los visitantes se construyó el 16 de febrero de 2008 con la idea de conmemorar la inmigración china a la ciudad, y para mejorar las relaciones entre México y la República Popular China; está hecho de acero-hormigón reforzado y recubierto con cerámica, granito y mármol, y está decorado con dos leones gigantes.
Para diseñar el calendario de actividades artísticas y culturales, desde hace muchos años se conformaron sucesivos comités organizadores. Lamentablemente, a partir del inicio de la pandemia de Covid-19 el organigrama se disolvió, sin embargo, los comerciantes más entusiastas han anunciado diversos números, como el paseo del típico Dragón Chino.
Ahí, y en otros sitios de la capital como el Centro Nacional de las Artes (Cenart), habrá conciertos de tambores, espectáculos de wushu/kung-fu, las tradicionales danzas del León y del Dragón, circo, teatro de sombras chinescas, narraciones orales, talleres de pintura, papel picado, tai chi, weiqi y tenis de mesa, bazar de gastronomía y artesanías chinas.
Habrá números escénicos a cargo de la escuela de stunts del legendario Jackie Chan, y las exposiciones fotográficas “Nihao China” y “Zodiaco Chino 2024”. También, la muestra de artes plásticas “Quienes siguen al dragón son las nubes”, con artistas chinos y mexicanos, así como las “Esculturas de dragón”, de Sebastián Carbajal y Cristina Pineda.
Las actividades en torno al Año Nuevo Chino se llevarán a cabo de 11:00 a 18:00 horas, y concluirán el lunes 4 de marzo. La entrada es libre para todo público y representan una oportunidad para acercarse a esa cultura milenaria que tanto ha aportado a la mexicana, como su gastronomía, con sus tradicionales locales que ofrecen café y exquisito pan.