Inicio Gente al paso HUAPANGO ARRIBEÑO DE XICHÚ: 40 AÑOS DE PERSISTENCIA Y RESISTENCIA

HUAPANGO ARRIBEÑO DE XICHÚ: 40 AÑOS DE PERSISTENCIA Y RESISTENCIA

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Entre el 29 de diciembre de 2022 y el 1 de enero de 2023, en Xichú, Guanajuato, se llevó a cabo la edición 40 del “Festival de Huapango Arribeño y Cultura de la Sierra Gorda”. El Festival lo organiza un Comité Comunitario encabezado por el poeta huapanguero Guillermo Velázquez Benavídez, voz y líder de la agrupación musical Los Leones de la Sierra de Xichú.

En esta ocasión acudieron versadores invitados de España, Puerto Rico, Argentina y Cuba. El festival rindió homenaje a varios artistas populares ya fallecidos, entre los que destacaron Leopoldo “Polo” Estrada, sanmiguelense fabricante de mojigangas, y Cándido Martínez, trovador potosino que durante años fue el principal contendiente de Guillermo. 

Como homenaje a ese arte popular, se reseña en verso la última parte del Festival.

En un pueblito de ensueño,

allá por la Sierra Gorda,

se juntó una multitud

con anhelo que desborda

como inevitable alud:

una alegría sinigual

tremenda, internacional

para ver el festival

del gran huapango arribeño.

Cuarenta años de fandango

de voz popular y crítica,

donde el cantar se radica

entre tarango y tarango.

Ahí encontré, entre los cerros,

la sentida algarabía

que motivó al alma mía

con talentosos verseros.

Para la celebración de los 40 años del Festival de Huapango Arribeño, invitaron a artistas internacionales: Yeray Rodríguez, Tania Gil, Domingo Rodríguez “El Colorao”, Julia Rodríguez, Pedro Manuel Alonso y Fernando García, de Islas Canarias; Emiliano Sardiñas, de Cuba; Roberto Silva, Omar Santiago, Fabiola Méndez y Carlos Martínez, de Puerto Rico, y David Tokar, de Argentina.

En el fondo de la sierra

se escuchaban los troveros

que estremecían a la tierra

con sus versos muy certeros;

que levantaban fanfarrias

en la noche cantarina.

Había poetas serranos

que estaban con sus hermanos

de la Cuba y las Canarias,

Puerto Rico y Argentina

Mojigangas y tunditos,

cantos y rezos benditos;

danzantes y huapangueros

rendían tributos sinceros

a los que ya han partido.

Mi corazón está herido

al sentir en los violines

de noche a la madrugada

llantar por Leopoldo Estrada

y don Cándido Martínez

Los trovadores internacionales

Los poetas de otros lares

deleitaron con su canto;

alejaron los pesares

con su arte y su encanto.

Nos mostraron su destino

Jeray, Pedro y Emiliano,

Tokar y su canto ufano

de payador argentino

La topada

Los contendientes fueron Guillermo Velázquez y los Leones de la Sierra de Xichú y la descendencia López; frente a Tobías Hernández, acompañado por Guilebaldo Díaz, Alex Montaño y Valentín Gil. Antes de la topada rindieron homenaje a los grandes maestros del Huapango: don Gabino Landaverde y don Jesús Martínez.

Poco antes de medianoche

dio comienzo el contrapunto:

por Xichú estuvo Guillermo,

poeta de gran historia

que del arte hace derroche,

cual Quijote con su yermo,

para levantar barunto

con Tobías el de Victoria.

2023

Cantos, abrazos y cohetes

recibieron año nuevo

y yo mi tequila bebo:

que me besen los cachetes

yo brindo por mis amores,

por dejar ideas malsanas

por oír los trovadores

entre el sonar de campanas

Ahí se quitó el estrés

y miré la lontananza:

se percibía la esperanza

para 2023

Pasada la medianoche

continuaba la topada:

del arte hacían derroche

en esa noche nublada.

Trataron temas variados:

recordaron sus pasados

y pidieron valorar

a la expresión popular.

Ahí estuve, entusiasmado,

escuchando su versar:

filosófico cantar

entre verso y zapateado.

Cantaron al universo

con claridad y sin mito,

de este planeta inmerso

en el cosmos infinito;

del valor de la palabra,

de herencia de los ancestros;

en el versar eran diestros

con sentidas emociones,

con el huapango que labra

muy profundas reflexiones

Improvisaron canciones,

sacaron su vena crítica,

deleitaron con sus sones,

versaron sobre política.

Ya para el amanecer,

Guillermo retó a Tobías.

El de Victoria rehuía,

mas no se dejó vencer.

Y así llegó el nuevo día

e iluminó la topada:

canto y baile en madrugada

y una total alegría.

Guillermo cerró la tanda,

reconoció a su adversario

y en esa fría alborada

lanzó un verso temerario:

ya estoy grande, anunciaba,

y mejor se retiraba.

Su hermano Eliazar subió

al tapanco a pedir voto

a toda la concurrencia,

que con masiva sapiencia

que continuara pidió.

Contrapunto internacional

Y ya a plena luz del sol,

sin cansancio ni pereza,

Jeray, trovador canario,

Y Emiliano el cubano

tuvieron un mano a mano.

improvisando huapanango.

Se subieron al tarango:

con Guillermo, el español,

se puso muy temerario;

Miliano, con entereza,

se refugió con Tobías.

Esos sí son buenos días

Hubo picardías y bromas

y con mucho sentimiento

le brindaron a la fiesta

un gran reconocimiento.

Despedida

Con el sol del mediodía

abandoné el mineral

y ya quisiera llorar

por tanta melancolía.

Oí el crepitar del río,

contemplé la serranía,

atrás se quedó el fandango.

Me acordé de mis amores

y quería sentir su abrazo

que bailáramos huapango

al son de su zapateado.

Me alejé muy consternado

por tanto placer vivir

y lo que ahí había gozado:

y no pude compartir.

He aprendido en el camino,

tras escuchar el portento

de poetas versadores,

inigualables señores

de impresionante talento

y su palabra certera

cumplen ellos su destino:

ser de gloria huapanguera.

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